La localidad de Avellaneda se encuentra sumida en una creciente ola de violencia. El reciente asesinato de un jubilado que intentó intervenir en una disputa entre vecinos pone de manifiesto la falta de control y prevención del delito en la zona.
Este trágico suceso se suma a una serie de hechos delictivos que han sacudido a la comunidad, generando preocupación y temor entre los residentes. La gestión municipal, encabezada por el intendente Jorge Ferraresi, ha sido objeto de críticas por la falta de medidas efectivas para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Vecinos y organizaciones locales han expresado su indignación y exigen acciones concretas para frenar la escalada de violencia. La necesidad de una revisión profunda de las políticas de seguridad y una mayor presencia policial en las calles se ha convertido en un clamor generalizado.
